Los lugares donde crecemos ¿influyen en nuestra personalidad?
Echadle un vistazo a este reportaje fotográfico de James Mollison, Where Children Sleep (Donde Duermen los Niños, 2010), en el que pone de relevancia las desigualdades entre niños de alrededor del mundo.
Podemos explicar la formación de la identidad a través de ciclos sucesivos de internalización y externalización. En primer lugar, integramos características de las personas, experiencias y objetos (incluso paredes) de nuestro alrededor, aunque no está claro de qué manera seleccionamos unas sí y otras no. En segundo lugar externalizamos quienes somos y lo que ya hemos aprendido sobre nosotros mismos en el entorno, a través del lenguaje, el comportamiento y los objetos. Sucesivamente seguimos internalizando y externalizado información que va solidificando en nuestra identidad. Este proceso dura toda la vida, pero es especialmente intenso en la infancia. Por eso vale la pena poner atención a las atmósferas de las habitaciones donde crecemos ¿qué nos indican sobre nosotros mismos y nuestro lugar en el mundo? y sobretodo, ¿nos dan oportunidades para expresarnos?
